Dicho así, igual suena un poco fuerte… pero déjame que te cuente.
Últimamente he estado realizando varias selecciones de personal con resultados positivos de incorporación en las empresas. Parece que cierta normalidad vuelve a estar presente en nuestras vidas. Y se agradece después de estos largos 20 meses, la verdad…
Es muy curioso lo que cada persona hace cuando llega a un nuevo puesto de trabajo. La forma en que se integra en esa nueva cultura.
Pocas personas observan. Algunas se presentan graciosos en un intento de caer mejor a sus compañeros y compañeras, sin darse cuenta de que esas gracias no siempre sientan bien cuando todavía no se ha generado la confianza suficiente para ello. En otros casos, ni te enteras de que se ha incorporado una persona a la empresa porque se lo impide su timidez y habla lo justo.
Pero, como decía, pocas personas observan. Y en esta simple, a la par que complicada, actitud, está el quiz de la cuestión. La observación es imprescindible cuando se llega a un nuevo sitio.
a
a
Cuando te paras y observas, vas a recibir una gran cantidad de información muy útil para tu evolución y desarrollo en ese nuevo lugar. Observar el contexto te va a proporcionar tres pistas muy claras acerca de:
a
1.- Cómo funcionan las cosas en ese nuevo lugar.
Observando lo que hacen las demás personas vas a poder hacerte una idea muy fiel de cómo funcionan las cosas en esa nueva organización. Lógicamente, no se trata de observar únicamente a quien tengas al lado, sino de observar a cuantas más personas, mejor. Sin intimidar, sólo observar con curiosidad.
Cada persona tiene su forma de actuar y de comportarse, pero seguro que, producto de nuestra observación, vamos a encontrar aspectos comunes que corresponden a cómo se hacen determinadas cosas dentro de la organización. Esos aspectos son los más interesantes porque, seguramente, son los que forman parte de la cultura y el estilo de ese lugar.
a
La interrelación humana es un aspecto tan necesario como complejo en una organización. Las relaciones entre las personas pueden ser saludables, cordiales, tóxicas o inexistentes. Si son saludables o cordiales, todo irá bien, pero si son tóxicas o inexistentes van a suponer una fuente de pérdida de energía y de productividad.
Observar las relaciones de los demás, nos va a permitir dos cosas: entender mejor cómo funciona la comunicación en la organización y, más personalmente, construir mejor nuestros propios modelos. Construir relaciones saludables provoca cercanía y respeto con las demás personas.
a
Es importante tener claro, desde muy pronto, cuál es el rol que desempeña cada persona en el lugar en el que nos encontramos. De esta manera se conseguirá más rápido moverse adecuadamente por la organización.
No sé a ti, pero a mí sí me ha ocurrido, en ocasiones, que me he dirigido a alguien con algún asunto que, después de exponerlo ampliamente, me han derivado a otra persona. Si hubiera observado con anterioridad o, incluso, preguntado, me hubiera ahorrado un tiempo muy valioso.
La observación del entorno nos permite entender mejor la filosofía y el estilo de la organización.
a
Una de las dimensiones de nuestro perfil emocional, según Richard Davidson, es la sensibilidad al contexto. Las personas desarrollamos, en mayor o menor medida, la capacidad de darnos cuenta de lo que ocurre a nuestro alrededor.
La sensibilidad al contexto nos permite regular nuestras respuestas emocionales en función del contexto en el que nos encontramos. En este sentido hay personas que tienen una gran sensibilidad al contexto y personas que no tienen ninguna. A las personas del segundo caso les costará más integrarse en grupos o en el contexto de un nuevo puesto de trabajo.
Gracias a la neuroplasticidad de nuestro cerebro, esta dimensión de la sensibilidad al contexto se puede desarrollar.
Puede parece políticamente incorrecto, pero si quieres que te quieran… intégrate bien el la cultura y el estilo de la organización. Por desgracia, he sido testigo de casos en los que un buen perfil profesional (a nivel cognitivo o técnico) ha salido de una organización porque la persona no ha sabido cómo integrarse en su cultura y su funcionamiento.
La actitud influye mucho en la forma en que nos perciben los demás. Desarrollar una actitud equilibrada es muy útil para los diferentes caminos por los que transita nuestra vida.
a
#52SemanasInteligenciaEmocional